Por Mercedes Caro Nodarse / Fotos de la autora
Olor a mar, puro mar inundaba los portales de la otrora casa de Don Luis
De Clouet, hoy Casa del Fundador de Cienfuegos, hace ya 200 años.
Un grupo de transeúntes se agolpaban curiosos a mirar el espectáculo. Estaban
allí varios hombres vestidos con impecables
ropas quienes paleaban dentro de un caldero enorme la paella Covadonga —plato
emblemático de Cienfuegos y gloria de la cultura culinaria—; las blancas
filipinas, el largo mandil y el gorro tradicional deslumbraban a los presentes.